Como os explicábamos en una entrada anterior, el verano es una época en la que la actividad en la empresa alcanza cotas máximas de exigencia. El motivo principal es que nuestros clientes desarrollan en su gran mayoría labores relacionadas con la hostelería y la restauración, que encuentran en los meses estivales su temporada alta.
El balance de momento está siendo espectacular. Un aumento del 15% en la facturación de julio es el primer dato objetivo que podemos compartir, y estamos seguros de que el mes de agosto se cerrará con cifras similares o incluso mejores.
Queremos aprovechar este espacio para hacer un doble agradecimiento: por un lado a nuestros clientes por la confianza depositada en nosotros; y por otro a nuestros trabajadores, porque sin su esfuerzo diario todo esto no sería posible.
